Guía para interpretar el comportamiento del motor en función del color de las bujías
Las bujías son una pieza fundamental sin la cual el motor de nuestro vehículo gasolina no podría funcionar. Pero además, también son nuestras cómplices a la hora de averiguar posibles averías del motor, ya que según el estado que presenta la bujía, podemos conocer que parte de nuestro motor está fallando.
En esta nueva entrada de nuestro blog vamos a explicar uno por uno los diferentes estados que pueden presentar las bujías de nuestro coche.
Aspecto: las bujías que presentan un color entre el grisáceo y blanco nos indican que el motor del vehículo funciona a un rango de temperaturas correcto y que el motor, en general, funciona bien.
Aspecto: una bujía con problemas de aceite tendrá un aspecto negro y aceitoso, lo que nos indica que está entrando aceite a la cámara de combustión.
Solución: debe inspeccionar si las guías de válvulas o los anillos de los pistones no hermetizan la cámara de combustión y por tanto está entrando aceite a esta
Aspecto: se pueden encontrar en la bujía depósitos blandos, secos y de color negro, que nos indican que la mezcla de combustible tiene demasiado aire, que la ignición es débil o que las bujías no son las correctas, lo que daría como resultado unas falsas explosiones del motor.
Solución: compruebe en primer lugar que las bujías son las correctas, compruebe que la especificación de la presión de combustible sea la correcta, así como el correcto funcionamiento de la centralita.
Síntomas: la parte aislante de la bujía tiene un tono brillante que nos indica que la temperatura ha aumentado repentinamente a causa de una sobrecarga.
Solución: reemplazar por las bujías recomendadas por el fabricante.
Síntomas: la zona de combustión o el electrodo de la bujía está deformado, lo que indica que se ha introducido material exterior en la cámara de combustión o que las bujías no se han instalado correctamente.
Solución: sacar cualquier objeto que pueda haber en el motor, cambiar la bujía y consultar el método apropiado de instalación.
Síntomas: si el desgaste del electrodo interior o exterior es excesivo, puede haber problemas al arrancar, un aumento del consumo y provocar combustiones falsas.
Solución: reemplazar por las bujías recomendadas por el fabricante.
Síntomas: la bujía está recalentada y los electrodos interior y exterior están derretidos.
Solución: comprobar que la bujía sea la adecuada. Asegúrese de que el sistema de refrigeración y la mezcla de combustible están correctas, prestando especial atención a los sistemas de EGR y el sensor de detonación.
Síntomas: el aislante de la bujía está descolorido y los electrodos excesivamente gastados o abollados. La cobertura de la bujía también puede estar descolorida con un color que puede ir del gris claro al negro pasando por azul oscuro.
Solución: comprobar la correcta sincronización del sistema de encendido y el sistema de combustión. Comprobar que los sistemas de refrigeración y escape funcionan correctamente. Reemplazar por las bujías recomendadas por el fabricante.
Síntomas: el color café oscuro de la bujía indica que hay depósitos incrustados en los electrodos a causa de los aditivos del aceite o del combustible.
Solución: si los depósitos sólo se encuentran en un lado de la zona de combustión de la bujía, mirar los sellos del vástago de la válvula y las guías de válvulas. Si los depósitos se encuentran en ambos lados, comprobar también los anillos de los pistones.
Síntomas: si la bujía presenta un color rojizo indica la presencia de los aditivos del combustible utilizado. Aunque estos depósitos no suelen afectar al correcto funcionamiento de la bujía, algunos combustibles contienen potenciadores de octanaje que dejan los depósitos en la bujía.
Solución: asegurarse de que los aditivos utilizados en el combustible se ajustan a las recomendaciones del fabricante del motor.
Síntomas: la zona de combustión de la bujía tiene manchas grises o negras. También se puede encontrar el aislante roto o con grietas.
Solución: utilizar un combustible con el octanaje apropiado. Comprobar los sistemas de refrigeración, escape, EGR y sensor de detonación.